El concepto e imagen general que la mayoría de gente tiene de Ibiza queda en un segundo plano cuando hablamos de Can Lluc.
Este hotel rural ofrece algo diferente que se aleja de lo conocido. El agroturismo cautiva a sus huéspedes con su elegante combinación de tradición y modernidad, el cuidado del huésped que brinda y la sensación de privacidad al estar situado en un valle rodeado de bosques de pinos.
El lujo en Can Lluc transciende de lo material y da prioridad a las emociones y experiencias de los visitantes. Ofrecen una atención totalmente personalizada y todas las reservas son cuidadas hasta en el más mínimo detalle, siempre con su toque personal.
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